¿Qué es el kratom?
El kratom (Mitragyna Speciosa) es una planta de la familia del café, también conocida como la familia de las rubiáceas. Su hábitat natural se encuentra en las zonas húmedas de clima tropical como Indonesia, Tailandia, Malasia, Myanmar, Filipinas o Nueva Guinea.
El kratom se ha usado durante milenios por los habitantes de las regiones donde crece de forma natural. Sus efectos han sido venerados por las culturas y civilizaciones de esas zonas gracias a su potencial como remedio medicinal.
Actualmente, la popularidad del kratom se ha extendido hacia el resto de países, sobre todo en Estados Unidos y Europa, por sus propiedades analgésicas y ansiolíticas. La actual crisis de los opioides le ha dado un papel relevante en la búsqueda de una solución no sintética y menos adictiva para los pacientes de dolor crónico.
Además, la planta es usada por muchos como suplemento anímico para ayudar a la concentración y con algunos síntomas de la ansiedad y la depresión.
¿De dónde se obtiene el kratom?
La forma más común de consumir kratom es en forma de té. Sus hojas se suelen triturar hasta conseguir un polvo fino que luego se infusiona para beber en agua caliente o fría. Hay personas que se tragan directamente el polvo sin disolverlo. También existen cápsulas con polvo de extracto de kratom concentrado.
El polvo de kratom que se comercializa proviene de las hojas del árbol del kratom, la parte del árbol que contiene una mayor concentración de mitragyna. Los árboles del kratom tardan alrededor de 3 años en alcanzar su crecimiento idónea. Algunos ejemplares pueden llegar a medir hasta 25 metros de altura.
Pasados los tres años, las hojas contienen ya la máxima concentración de mitragyna y están listas para ser recogidas. Las hojas se recogen a mano y posteriormente se dejan secar por varios días al sol o en interiores con aires acondicionados o con luces ultravioletas para ayudar al proceso.
Una vez secadas, las hojas se trituran en molinos o con máquinas especiales para obtener el fino polvo que luego se pone en bolsas y es distribuido alrededor del mundo.
¿Qué variedades de Kratom existen?
Existen varias cepas del árbol del kratom. Las principales son las variedades verdes, las blancas, y las rojas.
- Las cepas rojas son, sin lugar a dudas, las más populares entre los consumidores de kratom. Las hojas de las cepas rojas se caracterizan por tener los nervios de un color rojizo. Sus efectos suelen incluir la relajación muscular y el alivio del dolor, es una cepa relajante y que aporta una sensación de calma y claridad.
- Las cepas blancas son conocidas por sus propiedades energizantes. Muchos consumidores de kratom escogen cepas blancas para trabajar, concentrarse o incluso para hacer ejercicio. Los efectos de las cepas blancas también pueden llegar a ser eufóricos.
- Finalmente, las cepas verdes se encuentran a medio camino entre las rojas y las blancas. Los consumidores de kratom de cepas verdes explican que los efectos son una combinación perfecta entre relajación y estimulación. Muchos amantes del kratom señalan que esta es la mejor cepa para trabajar o concentrarse en algo que requiera inspiración.
¿Es seguro tomar kratom?
El kratom se ha consumido durante milenios de distintas formas y con diferentes objetivos. Los estudios sobre sus efectos destacan sus propiedades analgésicas, lo que lo hace popular entre aquellos que buscan un remedio natural para el dolor crónico, muscular, articular, etc.
En los Estados Unidos hubo polémica alrededor de la comercialización libre de la planta y sus derivados. Un informe de la FDA (Administración de medicamentos y alimentos de Estados Unidos) y un posterior informe del CDC (Centro de Control de las Enfermedades y Prevención de los Estados Unidos) decían que había habido unas 90 muertes entre el 2016 y el 2017 asociadas a sobredosis de kratom es Estados Unidos.
Sin embargo, sus informes carecieron de credibilidad científica suficiente para ilegalizar la planta en el país, puesto que la mayoría de los casos mencionadas se habían encontrado otras sustancias ilegales en el cuerpo de los fallecidos como cocaína o heroína.
Existen numerosos estudios que afirman que el riesgo de adicción del kratom es equivalente al del café, así como que una sobredosis de kratom es algo altamente improbable si no se mezcla con otras sustancias.
A raíz de esa polémica, surgieron en Estados Unidos numerosas instituciones y organizaciones pro legalización del kratom.
La más importante ha sido la American Kratom Association (AKA), que ha impulsado medidas tan importantes como la Kratom Consumer Protection Act, una ley que ya se ha aprobado en algunos estados del país y que garantiza una regulación del kratom y los productos derivados.
De esta manera, poco a poco, se está facilitando el acceso a kratom legal y de calidad a los millones de consumidores que lo requieren para poder vivir sin depender de medicamentos opiáceos.